jueves, 23 de agosto de 2012

Reflexiones y razones para leer y releer “La última noche” de Paco Gallardo.-

Como la vida misma.-

Por Juan Mellado.-

Mis razones para leer y releer “La última noche” de Paco Gallardo, Premio Ateneo de Novela Histórica 2012, no están basadas en contenidos histórico-literarios o de crítica científica. Más bien son producto de una lectura desde el sentimiento y las sensaciones que me transmite este emotivo libro de Paco, médico, deportista, escritor y sin embargo amigo.

Dije también releer porque como los buenos libros cuando más se aprende es en su segunda lectura, al pararse uno de nuevo en cada párrafo y adquirir nuevos detalles antes no vistos. En esos detalles me baso para razonar y recomendar la lectura del libro.                                                                            

Mi primera impresión es lo llamativo de hacer protagonista de la historia a una mujer en una época en la que no se valoraba, lo que la engrandece máxime cuando ella reivindica el derecho a escribir sus memorias a escondidas y cuando Paco sabe magistralmente meterse en el alma femenina.

Es también el médico que escribe sobre una médico y que seguramente escribe sobre él mismo, salvando las distancias de género, trasladando su bonhomía al personaje de la protagonista Sara Avenzoar.

Muchas veces encuentras detalles en cualquier libro que de tanto repetir parece que carecen de trascendencia. En este punto me paro en el caso de los agradecimientos. Ahí es donde nos podemos perder o equivocar al no nombrar a personas, pero Paco Gallardo lo hace con quien lo tiene que hacer por derecho  propio, a su padre Francisco, “que habita en el séptimo cielo de mi memoria” y para María, su madre, para que sea eterna.

No tuve la suerte de conocer a su padre, pero a Doña María la admiro en su sinceridad aplastante.

Como de sinceridad está lleno el libro en cada párrafo que se desnuda para el lector.

Su personaje principal, Sara Avenzoar, dice:”Este manuscrito está destinado al olvido o al fuego voraz en el caso de ser descubierto”.

Efectivamente es una preocupación constante a lo largo de la historia, la quema de libros como ya se reflejara en la novela Fahrenheit 451 de Ray Brabdury y de la que Francois Truffaut hiciera una gran película.

Incluso en la sociedad actual y al ritmo que llevamos, pronto se podrá oír por ahí aquella noticia de “detienen en la vía pública a un hombre tras ser sorprendido leyendo, se le aplicaron agravantes al descubrirse que además era un libro”

Este problema no solo lo vivirá Sara, sino mucha más gente a lo largo de la historia a manos de sátrapas, dictadores, genocidas e ignorantes.

 Nuestra protagonista afirma además que “Los primeros recuerdos están grabados en la memoria con el color gris del miedo”. Otra constante de muchas sociedades en donde los aires de libertad brillan por su ausencia.

 
Aparece en el libro un personaje tan singular como Averroes que dice:

“Los músicos emiten sonidos al dictado de sus emociones y la magia surge cuando las notas provocan el mismo estado de ánimo en quienes las escuchan”

En mi opinión eso es lo que ha conseguido Paco Gallardo con su novela, trasladarnos su estado de ánimo, contagiarnos y emocionarnos.

También queda reflejado el mundo del vino. Así sobre el vino y la tradición dice el poeta y médico Abu Bakr:

“No es malo el vino sino el interior del hombre que lo bebe”

Lo que traducido en Román paladino es que el que es un hijo de la gran puta lo es con vino y sin vino. Además la gran diferencia entre un borracho y un imbécil, es que el primero se acuesta ebrio y se levanta fresco y el segundo no tiene solución.

Hace también aparición la fantasía. Así la esclava dice a la protagonista sobre su lejano país:      

“Hace tanto frío que las madres que paren en invierno retornan las criaturas a su vientre hasta que llega la primavera”   
Bueno, en la vida real las cosas son más prosaicas de lo que nos dibuja Sara Avenzoar en su historia. Precisamente tengo una buena amiga a la que los vecinos le daban las quejas por el porculo que daban sus sobrinos, unos niños muy traviesos.

Textualmente fue así: “Mira Regli dile a tu hermana que se meta los niños”... bueno ahí donde ustedes ya adivinan.
A lo que mi amiga Regli contestó con la cachaza que la caracteriza: “Mira fulanita, los niños son como los tapones de las botellas de champán pues una vez que salen no hay cojones de oso de volverlos a meter de nuevo”.

 

Aunque ambientada en el siglo XII, la novela contiene conceptos muy actuales, así el personaje Zubaydi dice”

“Los vestidos de una persona no lo enriquecen lo más mínimo cuando es poco lo que alberga el alcázar de su espíritu”

Sobre la realidad del poder dice Abu Bakr:

“Nada es más peligroso que un poderoso despechado”

Refleja además los atrasos y tabúes de aquella sociedad que podía bien ser la nuestra, como así aparece que nuestra heroína, Sara Avenzoar, tiene que enterarse de los secretos íntimos de la mujer tras leer el libro de Trótula.   

Por otro lado, la rebeldía de la protagonista no deja lugar a dudas:

“No había nada que me estimulara más que las prohibiciones de mi madre”.

Sara es culta, independiente, rebelde y crítica.

Contiene también el libro lecciones sobre lo políticamente correcto o las normas de sociedad. Es la realidad de la vida, lo que aquí llamamos la gran mentira. Así Abu Bakr le dice a su sobrina:

“No te preocupes princesa, te enseñaré a controlar tus emociones para que puedas hacer en esta vida lo que desees”

Sobre la vida, Sara desconocía además que en las reuniones de mujeres se podía decidir el destino de los caballeros más aguerridos como si fueran peones de un tablero de ajedrez.

Butayna, la esclava, remata: “El mundo es de las mujeres que aparentan obedecer a los hombres”

Es una novela también sobre el poder del lenguaje, así Sara dice:

“Comprobé que con la palabra se puede hacer más daño que con la punta de una flecha envenenada”

Es una novela que habla del ejercicio del poder  y de su coste:

“El poder agrieta la piel del alma”

Sobre la postura a tomar ante la profesión dice su abuelo cuando Sara es nombrada médico:    

“Nunca ocultes tu ignorancia tras la máscara de la importancia”

 Es una novela sobre el amor. En palabras de Sara:

“No busques el amor que no se encuentra, llega cuando tu corazón menos lo espera”

El amor es una batalla en la que no conviene poner en conocimiento del amado los resquicios por donde tu fortaleza puede derrumbarse”

Y una cita demoledora sobre las personas como por ejemplo cuando nombra a Averroes:

“Averroes se ocultaba sobre la máscara de la inteligencia para que el mundo no le hiriera más”

 El mundo de la sexualidad es a veces para mí tratado de forma jocosa, por lo menos eso me parece a mí desde la postura de un pícaro lector chipionero del Siglo XXI. La protagonista le pregunta a Averroes si existe el semen femenino:

“Aristóteles  lo niega y explica que el esperma del hombre es queso derretido por la temperatura del deseo, que se funda con la espuma que la mujer segrega con el placer”

Y ahí no me quiero extender más en las propiedades del requesón porque no quiero que confundan ustedes a Juan Mellado con Luis García Berlanga.     

 Habla también sobre la tragedia de ser honrado. Cuando el marido de Sara es enviado a la guerra por el califa, al despedirlo Sara se preocupa culpabilizándose:                               

“Me pregunté la causa por la que esta vida se ensaña con los que llevan en su corazón el diamante de la honradez”

En otro momento, es también demoledora sobre las habladurías de la gente:

“La gente que no tiene vida propia hurga en la de los demás para buscar consuelo de su propio fracaso”

Aparece además la palabra quemada¨

“Cuando Averroes llegó a Córdoba, sus  libros fueron quemados para general escarmiento a las puertas de la mezquita. La palabra quemada solo trae desgracias” (Abu Bakr)

 

Reflexiones sobre cómo se muestra la vida ante todos nosotros:

“He visitado nuestra casa y me ha entristecido verla, se ha convertido en un jardín de escombros y muros derruidos. Sentí pena en mi corazón. Acaso la vida sea solo eso, contemplar cómo se van derrumbando las cosas que nos han rodeado”

 
Conclusiones Finales:

Me llamó mucho la atención la existencia en la novela de LA CASA CONTIGUA:

“Era conocida  como la casa contigua porque en ella habitaban hombres y mujeres, de distintas edades, clase y condiciones, que se habían apartado al lado contiguo del mundo para ser felices”                       

 
 En la realidad muchos vivimos también en esa casa contigua ante la falsedad del mundo que no rodea, es nuestro último refugio porque como bien dice nuestra Sara “LA VIDA ES LO QUE NOS PASA Y NO LO QUE DESEAMOS QUE NOS OCURRA”.

 


Francisco Gallardo.-

Francisco Gallardo Rodríguez es médico de profesión, especialista en Medicina y Traumatología del Deporte. Ha desarrollado su carrera profesional en el Caja San Fernando de baloncesto, en la selección española de baloncesto, en el Club Sato Sport, en el Centro de Alto Rendimiento de la Cartuja, y durante veinticinco años ha investigado acerca de la Medicina en Al-Ándalus, lo que le llevó a crear su segunda novela “La última noche” donde este autor ha querido recrear la Sevilla almohade.

Sinopsis:

Al final de su vida, en el año 1195 de los cristianos y 589 de la Hégira, Sarah Avenzoar —nieta del famoso médico Abu Marwan Avenzoar y médico ella misma— rememora su infancia en Sevilla, rodeada de tratados de poesía y medicina: allí conoce a su abuelo Abu Marwan, recién llegado del destierro, y al ilustre Averroes, ante quien se hace merecedora de la iyaza, el permiso para atender y curar a mujeres y niños. Con el paso de los años Sarah se desplaza a Marrakech y ejerce la medicina en el harén del califa, donde se verá envuelta en las intrigas políticas entre almohades y almorávides, y en las no menos peligrosas intrigas de las mujeres del harén, algunos de cuyos secretos podrían acarrearle la muerte. Basada en el personaje histórico de la nieta de Avenzoar, La última noche es un viaje a la Andalucía del siglo XII y al imperio almohade que desde Marrakech gobernaba las dos orillas del Mediterráneo, un mundo fascinante donde la suntuosidad de Las Mil y Una Noches se mezcla con un inusitado desarrollo técnico y quirúrgico, de la mano de una de las primeras mujeres que practicó legalmente la medicina. Pero ninguna medicina puede curar las heridas del alma…